En muchas ocasiones, arrojamos en ellos restos de comida y otros desperdicios similares. Hay que ser muy cuidadoso en este punto, ya que la mayoría de los problemas surgen por esta causa.
Asimismo, nos deshacemos del aceite usado generalmente por el fregadero, cuando esta sustancia puede acabar formando una película en la tubería que con toda probabilidad, llegará a atascarla por completo.
Además, esta práctica es bastante nociva para el medio ambiente, y parece todavía peor si pensamos que el aceite se puede reciclar de manera sencilla, llevándolo al punto limpio de nuestra localidad. También los jabones, detergentes y lavavajillas que utilizamos pueden acabar dañando las tuberías, en especial por la espuma que generan, que va depositando sedimentos en las cañerías, que se endurecen poco a poco y taponándolas poco a poco.
Por ello, si sufre alguno de estos habituales problemas, podemos ayudarle a resolverlos de una manera rápida, sencilla y, sobre todo, barata. Consúltenos si desea más información.